Más de 50 geoglifos de variadas formas y tamaños, incluyendo una enorme esvástica, han sido descubiertos en el norte de Kazajistán, en Asia Central. Estas estructuras, en su mayoría formadas por montículos de tierra, crean un paisaje similar al que se aprecia en las famosas líneas de Nazca en Perú.
Google Earth ha resultado ser una herramienta útil, tanto para la antropología como la arqueología. Gracias a sus imágenes satelitales, investigadores han descubierto más de 50 geoglifos en el norte de Kazajstán, en Asia Central. Estas estructuras, en su mayoría montículos de tierra, crean un tipo de arte similar al famoso paisaje de la región de Nazca, en Perú.
Los geoglifos son difíciles de ver en el suelo, pero pueden ser fácilmente vistos desde el cielo. Constan de diferentes formas geométricas, incluyendo cuadrados, anillos, cruces y suásticas (la suástica es un diseño empleado en la antigüedad). Algunos de ellos son más largos que un avión promedio, con diámetros que van desde los 90m hasta los 400m.
Durante el último año, expertos de la Universidad de Kostanái, en Kazajstán, y la Universidad de Vilna, en Lituania, han estudiado los geoglifos. Tras conducir excavaciones arqueológicas, un análisis del suelo mediante radares y tomar fotografías aéreas, el equipo presentó sus resultados preliminares en la reunión anual de la Asociación Europea de Arqueólogos en Istambul.
La mayoría de los geoglifos fueron creados con montículos de tierra, aunque algunos, como la swástica, se hicieron con madera. Los arqueólogos descubrieron en ellos restos de antiguas estructuras y chimeneas, sugiriendo que eran empleados en rituales. Es posible que las tribus también los hallan utilizado para delimitar terrenos y marcar propiedades.
Por ahora, únicamente se sabe que fueron construidos por pueblos antiguos. Permanece un misterio quiénes fueron y por qué lo hicieron.