Extraños agujeros en la tierra hallados en el norte de la tundra siberiana este mes de julio, podrían significar el comienzo de un cambio irreversible en el clima de nuestro planeta. Según científicos rusos, la razón más probable para la formación de tales agujeros sería la emisión de gas natural causada tal vez por el calentamiento global.
Siempre es algo desconcertante la apertura inesperada y abrupta de hoyos en la tierra. Un par de cráteres de dimensiones considerables se han formado en Siberia con pocos días de diferencia. El Moscow Times reporta que ambos agujeros fueron hallados a solo 30 km de distancia uno del otro. Mientras que el primero tenía 50 metros de ancho y 70 de profundidad, el segundo y más reciente es más pequeño. «Nunca he visto algo como esto, y eso que he estado en Yamal muchas veces», dijo Andrey Plekhanov al Siberian Times. A pesar que la península de Yamal es el área de mayores reservas de gas natural para abastecer a toda Europa, los expertos no creen que los hoyos sean creados por las prácticas de producción de petróleo y gas (Upstream). Entonces, ¿qué los está provocando? Un riesgo explosivo Hace 10,000 años atrás, el área era un mar, y la mezcla de gas, arena, gas y agua se congeló y convirtió en hielo subterráneo. Ahora, a medida que el planeta se calienta, el hielo comenzó a derretirse y el gas a ser liberado, causando así un efecto parecido a destapar una botella de champagne. «Estas explosiones subterráneas están causando los hoyos», afirma Anna Kurchatova, científica del Centro de Investigación Científica del Sub-Ártico.
La comunidad científica empieza a preocuparse debido a que esto podría acarrear graves problemas para nuestro planeta en el futuro. El permafrost alrededor del Ártico contiene metano y dióxido de carbono, y ambos podrían ser muy peligrosos para nuestro medio ambiente si las temperaturas siguen elevándose y son liberados. El metano, liberado en la atmósfera, es capaz de atrapar 20 meses más calor que el dióxido de carbono. Es decir, que este gas liberado debido al cambio climático producirá —como uno puede deducir— más cambio climático. Los reportes que se están dando a conocer este mes debido a la cobertura mediática que se ganó este fenómeno, indican que existe la posibilidad que la formación de estos cráteres gigantes se vuelva algo frecuente a medida que se derrite el permafrost. Asimismo, también se destaca que es difícil predecir cuándo y dónde ocurrirán estas explosiones debido a la naturaleza remota de la tundra que no permite mucho estudio sobre gases como el metano.
Fuente: Mysteryplanet