Fieles de todos los tiempos han señalado al Santo Sepulcro como la tumba en donde yació el cadáver de Jesucristo, hasta su resurrección. Está situado dentro de la Iglesia del Santo Sepulcro, la edificación más sagrada para el mundo cristiano y una de las más enigmáticas para la ciencia.
Mientras que la Iglesia explica la muerte y resurrección de Jesucristo a través del dogma de la Resurrección, historiadores y científicos ponderan la posibilidad de que en realidad no haya muerto en la cruz. Lo cierto es que, hoy, las tres grandes religiones monoteístas del mundo poseen una parcela secular en Jerusalén, Tierra Santa, y los cristianos particularmente encuentran en la iglesia del Santo Sepulcro su lugar más sagrado.
Hoy, la iglesia del Santo Sepulcro está custodiada por las distintas escisiones del tronco común cristiano: coptos, ortodoxos griegos, protestantes, armenios y católicos, entre otros, todos tienen una capilla y una parcela a cargo. Si bien no es posible afirmar a ciencia cierta que el Santo Sepulcro es el lugar en el que efectivamente Jesucristo murió, estudiosos y religiosos coinciden en señalar que no existe otro lugar más plausible.
Ver: http://mx.tuhistory.com/programas/milagros-decodificados-premium/santo-sepulcro.html
Fuente: Tuhistory.com